Hoy me he acordado de estos recuerdos porque cuando me he despertado no paraba de llover. Durante toda la noche ha estado cayendo agua como si del diluvio universal se tratase, y me ha costado abrir los ojos puesto que la habitación estaba tan oscura como si fueran las 9 de la noche. Y lo primero que ha venido a mi pensamiento esta mañana mientras permanecía en la cama escuchando la lluvia ha sido la imagen de un libro, un libro que hace muchos años me trajo mi padre y que guardo con mucho cariño en la estantería de mi habitación rosa junto a las barriguitas y los ponys.
He de confesar que ya no duermo en esa habitación, y que le cogí especial manía al color rosa debido a los gustos de mi madre por ponerme todo de ese color, pero tanto los libros como los juguetes de esa época los conservo en muy buen estado.
Los días de lluvia tienen algo especial, y es que hagas lo que hagas sabes que tienes que mojarte. Esta misma mañana tenía que salir a la compra, y de estas cosas que dices "pues tengo que ir a comprar..." y alguien te responde "pues yo también" y decidimos quedar en mitad del camino para tomar un café.
Os preguntaréis con quién he quedado. Pues ha sido con el personaje de alta alcurnia que conocí hace poco. Verle llegar dando saltos esquivando charcos y sacudiendo su paraguas me ha provocado la primera sonrisa de la mañana. Quedar a tomar café con él siempre es interesante. De hecho yo he tomado la decisión de llevar papel y boli para ir anotando todas las ideas que él va soltando por su boca mientras habla.
Hoy le he visto algo mas delgado que la vez anterior, y me ha hecho mucha gracia su atuendo, llevaba un jersey de cuello alto bastante gordito muy navideño, de hecho sólo le faltaban los renos de Santa Claus y que fuera rojo en lugar de azul.
Es un personaje de los que quedan poquitos. Te comenta historias tan interesantes que no tienes mas remedio que coger una servilleta, pedir un bolígrafo e ir anotando cosas, aunque finalmente te olvides la servilleta junto a la taza del café. Quizás otro día haga un post sobre esas ideas perdidas que se quedaron en las servilletas de los bares.
En ocasiones te mira con sus ojos entre azulados y grises y te habla sobre Bob Esponja o incluso de cómo utilizar un extintor para otros usos alternativos a los incendios. Es sencillamente genial.
Antes de decirnos adiós, él ha ido a comprar su periódico, el cual traía un cd de un curso de alemán, y a continuación me he despedido con una ligera reverencia hasta la próxima cita.
Por la tarde he ido a clase de alemán y lo mejor de la clase ha sido cuando me he ido a aprender la verdadera cultura alemana al bar a tomar unas cañitas y unos pinchos.
Yo creía que el día acabaría aquí, sin embargo por casualidades remotas me he enterado que esta noche actuaba en un local en mi ciudad Luis Larrodera, un cómico al que sigo y cuyo humor me encanta. Asi que tras salir del bar he ido a ver el monólogo.
Hacía muchísimo tiempo que no me reía tantísimo, y lo que me ha impactado es que en el descanso le he parado para que me firmase una foto suya y al decirle mi nombre, automáticamente sabía quién era en mi cuenta de twitter, y ha hablado conmigo como si fuera una amiga que hacía tiempo no veía y me ha contado alguna que otra cosa interesante sobre sus proyectos. Y cuando al final del show ha venido y me ha regalado una bolsa de Peta Zetas, que era parte de su monólogo, he sido la personita más feliz del local seguro.
Quizás el día empezó con charcos en el camino, y como en la novela, lo único que tenemos que hacer es aprender a sortearlos o si nos meteos dentro, asegurarnos que llevamos unas buenas botas de agua, pero sobre todo hay que intentar acabar estos días de lluvia con grandes carcajadas, porque al fin y al cabo es algo que se contagia.
Mi consejo de hoy: En ocasiones es inevitable meterse en charcos, algunos inesperados, y otros que nos salpican sin darnos cuenta, pero está en nuestras manos el saber salir de ellos de forma airada e incluso aprendiendo lecciones valiosas. Antes de ir a dormir, procurad reír a carcajada limpia durante un buen rato, yo creo que hasta se rejuvenece.
Ay, querida Gemma, eres divida. Cada vez que te leo me leo a mí misma haciendo las cosas que dices y hoy me has arrancado una gran sonrisa. Justo cuando me dí el porrazo con el espejo. Me has hecho recordar algo que me pasó hace muchíiiisimos años en un cine. Bajaba tan tranquilamente las escaleras del baño y me disponía para entrar a ver la película. Dentro me esperaba mi novio (ahora incluso marido). Cuando mi pie no acertó a posarse debidamente en el escalón que tocaba y me dí un buen golpe contra el suelo. Claro, me levanté a cien, me arreglé la ropa y me fui hacia mi asiento, al lado de mi novio, con una sonrisa de oreja a oreja como de "aquí no pasó nada". Cuando siento en el hombro untoque de alguien que me dice: "Perdone, esto es suyo" (con el tacón de mi zapato en la mano). Imagínate, casi me muero de la vergüenza. No me había dado cuenta con el apuro que pasé, ni del desnivel de mis piernas. Gracias Gemma por transportarme a tu vida y hacerme recordar mis momentos olvidados. Kiss.
ResponderEliminarJajaja, pero que he escrito? "Eres divina" quise decir y, "cada vez que te leo me veo a mi misma"......como estoy hoy!!!
ResponderEliminarMi querida Sonia, te he entendido... pero me gusta mucho mas ser divida que divina, me parece mas original jajaja
ResponderEliminarTu anécdota cinéfila tacón en mano es súper graciosa, aunque me gustaría saber el después de esa cita, porque digo yo que luego si que notarías el desnivel, sobre todo si acabaste dando un besito a tu novio jijiji ¡Qué recuerdos tan bonitos! A mi también me pasó una cosa parecida en el cine una vez, pero creo que con la tuya ya tenemos suficiente por hoy. Un besote enorme galleguiña de mi corazón.
"Los días de lluvia tienen algo especial,y es que hagas lo que hagas sabes que tienes que mojarte"...q bonito Toledo mojado.
ResponderEliminarMe encanta,tu amigo-personaje.
Gracias,por tu tan grata y espectante escritura.
Siempre tuya,Caracola,Bs,d mojitos,empezamos pronto,jajaja.
Hoy te ha quedado perfecto el tema "espacios" Caracola de mis amores, para mi que tienes que escribir los comentarios con un par de mojitos ya jejeje
ResponderEliminarLas calles de Toledo son preciosas, llueva o haga sol. Voy a darle al mojito que me has preparado...