martes, 14 de mayo de 2013

Felicidades...

Tras pasar una noche un tanto extraña en la que apenas dormité unas tres horas, hoy me tuve que levantar muy temprano.
En mi mente había varios pensamientos e imágenes entremezclándose, historias pasadas, presentes y futuras que iban a tener lugar en este martes extraño.

La noche anterior estuve divagando mucho sobre lo que podría sentir a lo largo de este día, lo esquematicé mentalmente y asimilé cada uno de los sentimientos que me vendrían impuestos. Sin embargo siempre algo sucede que hace que todo lo que tienes controlado se desmorone y debas improvisar sobre la marcha.

Mi día comenzó a las 8 de la mañana cuando tenía que ir a la oficina para despedir a dos empleados. En mi mano una carpeta llena de papeles, finiquitos, cartas, leyes y las últimas nóminas. En mi mente dos imágenes y varios pensamientos aciagos, las caras de esos dos trabajadores y las historias personales de cada uno de ellos.
Durante el camino y resguardándome tras mi carpeta como si fuera un escudo protector, repasaba una y otra vez las palabras que diría. Esas palabras que me hicieron llegar hasta esta situación, esas comparativas tan de moda hoy día con el tema de la crisis... la pescadilla que se muerde la cola. Si no te pagan no puedes pagar y así todos.
La situación habia llegado a tal extremo que tras mucho meditarlo pensamos que era lo mejor. Y ahora me tocaba a mi hacer el papel del poli malo y despedir a aquellos desafortunados que pasaban a engrosar las listas del paro, cada día mas concurridas.
Al llegar, ellos me estaban esperando fuera, uno le comentaba al otro que el día anterior un policía le había puesto una multa por llevar las ruedas gastadas, y el otro con un tono algo sarcástico le decía que le hubiera comentado que iba a quedarse sin trabajo y que a partir de ahora iría en bicicleta.
Al verme se acercaron a mi y me saludaron. Entramos al despacho y ambos muy serios se sentaron.
Nunca había estado en una situación de este tipo, siempre había sido en el otro lado, aquel en el que no tienes poder para hacer nada. Ahora debía aparentar fortaleza y no ser débil, que no me pudieran las historias de cada uno. Pero tras un año de trabajo conjunto, lo cierto es que es difícil no involucrar los sentimientos en alguien que conoces y con el que has tratado de cerca.

La situación es la que es, no os puedo engañar... de momento hemos aguantado como hemos podido pero llega un punto en que se hace insostenible y los pequeños empresarios hemos de afrontar todos las consecuencias.
Les expliqué correctamente cada uno de los papeles que les entregaba y ellos con mirada resignada procedían a firmarlos uno a uno.
Mientras lo hacían me ponía en su lugar y por dentro recordaba mis últimos días en los sitios donde estuve trabajando, y donde siempre acababa llorando a lágrima viva junto a mis compañeros.

Entonces volviendo de mis sueños y mirándoles me vi en ellos pero en diferentes etapas de unas vidas muy distintas pero con un mismo final.
Tras darles las gracias por todo el trabajo realizado procedí a hablar en privado con uno de ellos, el cual tenía un familiar enfermo y le pregunté por él. Entonces sucedió algo que me rompió en pedazos.
Me relató una historia con un final feliz, pero sin embargo él estaba llorando diciéndome que le daba mucha pena marcharse porque habíamos sido como una familia para él. No pude evitar darle un abrazo y desearle suerte.
No quise darles esperanzas de que volverían, se las historias personales y se que es complicado hacerles esto en el momento que están viviendo, pero también es cierto que todo te hace mas fuerte.

En mi último despido a mi se me dieron una serie de acontecimientos inesperados unos tras otros y en ese momento en que lo ves todo negro te paras y levantas la cabeza, miras al frente y ves una pequeña luz hacia la cual empiezas a caminar, hasta que llega un día en que sabes que cada vez está mas cerca.

Tras cumplir con mi cometido y poner en orden toda la documentación me fui a casa y me quedé pensativa durante un buen rato.
Por la tarde tenía clase de inglés, me quedé dormida tras la comida y llegué tarde. Como consecuencia de ello mi profesor ya se marchaba, pero al verme decidió volver a dar clase. Por lo visto yo era la única alumna de ese día, el resto parecían haberse tomado el día libre puesto que hoy empezaban las ferias. Pero no me importaba estar sola y aprender.

Después de mi clase regresé a casa, hoy fue mi santo y quería celebrarlo. Hacía años que no lo celebraba, él me lo "impedía" puesto que hoy era su cumpleaños. Siempre me esforzaba en hacerle algo especial y al menos de una u otra forma pasar el día juntos. Hoy cumpliste 33 años y no te felicité, no como hubiese querido, porque se que ya no me darás una respuesta. Por eso mismo, hoy celebré mi día y por ello me quise hacer una tarta, esta vez para mi.
Tras dejar los libros me encerré en la cocina junto a los huevos, harina, levadura, yogur y demás ingredientes. Quise hacerme una tarta de yogur y probar a mezclar ingredientes diferentes a los que venían en la receta original. La cocina empezó a oler estupendamente y mi madre atraída por el olor me preguntó qué estaba cocinando. Una tarta para celebrar mi santo...
En mi empeño porque todo saliera a la perfección, algo falló, quizás las cantidades, el molde o todo a la vez, pero mi bonita tarta de yogur se había convertido en una mega cookie tamaño gigante.


Sin embargo al probarla sonreí porque estaba muy rica, y para mi eso era lo realmente importante.
Esta misma noche empezaron los fuegos artificiales de las ferias y los primeros conciertos que daban comienzo a nuestras fiestas mas esperadas de la primavera. Sin embargo he decidido quedarme en casa viendo la televisión. Tras de mi oía a lo lejos el ruido de los petardos y veía las luces de colores, sin embargo no estaba aqui, sin quererlo me había ido a tu lado y pensaba en cómo lo estarías celebrando. Te eché de menos, pero no tanto como para llorar, sino simplemente esa añoranza pasajera que tienes al comerte un pedazo de tarta.

Por la noche muchos detalles me hicieron sonreír, amigos que siempre están ahí y con los que hablas a diario, que no saben de tu historia pasada ni comprenden el por qué te encuentras desvelada por las noches pero que reconocen tu dolor y te hacen animarte contándote un chiste malo o simplemente confiándote sus historias... personas que sin quererlo se han convertido en parte de ti al igual que yo me he convertido en parte de ellas, personas que salen de tu vida tan rápido como entraron o que permanecen día tras día...

A gran parte de ellos debo todo esto, el ponerme a escribir de nuevo, el dejar el pasado un poco mas atrás, el vivir el presente con risas y el mirar las cosas habituales con otros ojos.

Hoy se que en mi familia todos y cada uno recordaron que era tu cumpleaños, pero nadie lo mencionó. Tras esas miradas de compasión hacia mi atisbé como podría sentirse mi corazón, sin embargo de momento la pequeña coraza que lo recubre hace casi imposible que me desmorone.

Todo lo vivido hoy fue intenso, desde primera hora de la mañana hasta ya bien entrada la madrugada, sin embargo marcho a la cama con una sonrisa, la que me da el haber recibido tantas felicitaciones como recibí, que aun sin regalos fueron las mas bonitas y sinceras del mundo.

Quizás hoy di un paso mas, alejando de mi esos fantasmas del pasado, preocupándome por historias del presente y esperando un futuro en el cual todo mejore.

Felicidades... a todas las Gemmas en el día de su santo, y a ti también.

3 comentarios:

  1. Muchas gracias pero, sinceramente, no me las merezco. :D Kiss.

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  2. Ooooooohh!! Cachis!!! Y yo sin darme cuenta de que era Sta. Gemma!! Ya ves que no estoy mucho al tanto del santoral. No se que pasó ayer que sólo podía ver el título del post y nada más. De ahí mi comentario anterior. Este me ha dejado muy triste.De la primera parte, la de los despidos, que voy a decir? Con la espada de Damocles colgando sobre mi marido, después de 20 años trabajando para su hermano....... Ya hace año y medio que tuvo que despedir a otro hermano suyo y demás empleados, así que te puedes imaginar. Y la segunda parte....... uff, no me gusta verte así. Yo no tengo fantasmas en mi pasado. Supongo que debe de ser muy difícil convivir con ellos. Espero que pronto dejen de atormentarte y puedas ser feliz libremente. El presente es lo que importa y, sonreir al futuro para que él nos sonría también a nosotros. Un abrazo muy grande. Siéntelo. Y muchas, muchas felicidades, aunque sea ya con un día de retraso. Kiss.

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    1. Tu abrazo lo llevo siempre conmigo y lo siento... muchas gracias Sonia. Tienes razón, son situaciones difíciles que hay que vivir y tener el coraje suficiente para llevarlas a cabo. Respecto a los fantasmas esos siempre estarán ahi hasta que algún otro ocupe su lugar, pero y aunque nunca se sabe, hay momentos difíciles de olvidar y sobre todo un día como fue éste, pero en el cual ya tengo algo importante que celebrar, mi vida, mi futuro y mis sonrisas futuras. Un besote.

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